Un día tipico... ¿ah, no?

Como casi todos los días de mi vida (al menos en época de cursado), me levante con pocas ganas de vivir, y marché al baño a darme los pocos cuidados personales para mantener en pie a mi persona ("usar el baño", lavarme los dientes y... eso es todo XD). Posteriormente (previo atropellarme la puerta del baño) me dirigí a la estufa con el objeto de aliviar los temblores que invadian mi cuerpo. Tenía frio, no un ataque XD.
Al sentarme frente a los apuntes descubrí que ya nada podía hacer para aprender mas sobre vacas (estudiante de agronomia ^^) y decidí que tal vez habia una pelicula en la tele que me interesaba. Importante error.
Ya apurada entro a bañarme, salgo, me visto y me dispongo a almorzar. Ya cubiertas las calorias necesarias para el dia (y un poco mas, debo decir) salí a ponerme en manos de... el trasporte publico mendocino. Esperé... esperé, y seguí esperando.
Despues de una hora y media de micro/trole (Chacras queda lejos), arribo al establecimiento que me provee de saber (aja¬¬).
Cinco horas de Shorthorn, Hereford y Averdeen Angus... y un profesor que tiene mas pinta de Cow Boy que Kirk Douglas.
Visita a la abuela de camino a casa (rico café con leche ^^), y por fin el retorno al hogar.


Sacando pormenores, es basicamente lo que hago un miercoles...


¿Nada de interesante? Lo se, yo jamás prometí que lo fuera.


XD


En fin... dejo otro poema viejo:


Si al caer no sientes mi mano,
date por dormido.
Porque el silencio llena mis pulmones,
y aún así puedes oírme.
Una gota de nada cae,
lagrimas insípidas,
inútiles.
Al rodar por tu cara,
busca encontrar mi mano,
y así morir desecada.
Sonríe, Ángel.
gánale al viento,
al tiempo.
Y en cada nota eres,
mas nunca mueres al acabar.
¡Vive, músico de plata,
que el corazón lo tienes de oro!

Caulquiera que me conozca saba a quien le escribí este


Que se yo... eso



][que lluevan besos][